Parecería que el tema de inseguridad ciudadana no es relevante para la mayoría de las y los Candidatos al Congreso. Si no me equivoco, sólo uno o dos de ellos han abordado este importante tema dentro de sus propuestas electorales.
Me comentaba una persona bastante mayor que hace años en Huánuco, la costumbre era que los vecinos se sentaban en la puerta de su casa para ver pasar a la gente y conversar despreocupadamente con sus conocidos. Si tenían que hacer algo dentro de su casa, ingresaban dejando la puerta abierta para luego volver a salir. A ninguna persona se le hubiera ocurrido ingresar a la casa aprovechando que la puerta estaba abierta y robar algo.
Asimismo, los niños jugaban alegremente en las calles sin ningún problema de ser atropellados porque en esa época, circulaban muy pocos autos. Jugaban con la seguridad de que nada malo les pasaría, salvo una raspadura o golpes producto del mismo juego. No había el problema del rapto de menores, pornografía infantil o el tráfico de sus órganos.
Un antiguo chófer de camiones me contaba que hace muchos años, cuando ya estaba avanzada la noche, estacionaba el camión en la carretera e ingresaba a la tienda más cercana a comprar algo para saciar su hambre. La puerta estaba cerrada sin seguro. Una vez dentro de la tienda, tomaba los productos, dejaba el dinero correspondiente sobre el mostrador y salía cerrando nuevamente la puerta. Este comportamiento era muy normal en aquella época. Sin embargo hoy nos puede causar asombro y parecería algo irreal.
Lo comentado anteriormente nos demuestra que las personas hemos ido cambiando. La deshonestidad, la viveza, la criollada, hoy forman parte de nuestro comportamiento cotidiano. Eres un sonso si no te aprovechas de los demás. Eres un tonto si demuestras ser muy honesto, hasta puedes ser el blanco de burlas por tu honestidad.
Ante la falta de una respuesta acertada del Estado para combatir la inseguridad ciudadana, las y los vecinos no hemos podido seguir esperando y por eso nos hemos visto obligados a tomar medidas de protección como: Colocar doble puerta a nuestra casa, poner rejas en las puertas y ventanas, instalar dos o tres chapas en la misma puerta, instalar cerraduras especiales con claves, instalar cerco de alambres de púas y los más sofisticados, colocan cerco eléctrico con alarmas incluidas, cámaras de seguridad. Por precaución dejan la luz prendida cuando salen todos los miembros de la familia. Los más audaces estudian defensa personal y adquieren un arma para defenderse. Es todo un presupuesto instalar sistemas de seguridad en el debemos incurrir por la falta de una respuesta acertada de parte del Estado.
Últimamente hemos visto la utilización de los motocar en el que van dos personas, mientras una maneja disminuyendo la velocidad, otra arrancha las carteras y celulares a las mujeres que caminan distraídamente por las calles.
Uno de los grandes problemas que tienen las autoridades al abordar la problemática de la seguridad ciudadana, es la concepción asistencialista para atender a las víctimas, los servicios y recursos se asignan para atender el hecho posterior, es decir, después que ha ocurrido el delito, pero no para la prevención. La sociedad está harta de tanta delincuencia y de tanta impunidad. Queremos un cambio. Señores autoridades la pelota está en su cancha.
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